Huellas de un camino bello en el corazón. 17 del 2 del 19, domingo, 9 de la mañana. Acudimos puntuales con la almohada aún pegada en la sonrisa. Un día de primavera que se cuela en febrero para recibir al Hernani, equipo bien armado y al que esperamos como solemos esperar a nuestros rivales, abrazo en mano.
El campo artificial se lo dejamos a los del fútbol. Nosotros al de hierba y barro. Al de verdad. Ayer estrenábamos zaguero y muchas cosas más. Estrenamos un día de rugby que no volverá. Match disputado, competido y bien jugado en las fases. Cada uno, cada una, donde, cuando y como tenía que estar.
Entrenamos como sonamos y sonamos como jugamos y ayer se escuchó una gran banda sonora de pases, apoyos, fluidez y vigor. Y la almohada ya no hacía en nuestras caras pero nuestra sonrisa no se fue en todo el día. Gran Hernani. Grande el Gaztedi RT Inclusivo. Familiares, aficionados y amigos fotógrafos en las bandas. Rugby x rugby igual a Rugby infinito. Justo empate a 15. Era lo de menos porque ayer volvió a ganar el gozo ovalado...
Fotos cortesía de Iosu Izuskitza, aquí
Fotos cortesía de Ibon Sáenz de Olazagoitia, aquí
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