El primer equipo del Esconsu Gaztedi, perdió el sábado una gran oportunidad de marcar diferencias en la categoría.
El partido que a priori se veia como asequible en esta OBM DHB, se convirtió en una losa para los pupilos de Miguel Beltrán. El Belenos, viejo conocido de los gasteiztarras, traía la lección bien aprendida, con sus fortalezas apuntaladas y con sus carencias bien trabajadas.
Se planteaba el partido con una defensa contundente por parte de los dos equipos que dejaba a las claras la lucha que se iba a desarrollar unas instalaciones de Gamarra llenas hasta la bandera. La ocasión lo merecía.
Los dos equipos correosos y duros en el contacto, tocaban una y otra vez las líneas contrarias en busca del fallo que abriera la lata del marcador. El Esconsu Gaztedi pasaba muchos minutos en la 22 contraria presionando con el balón en busca de un premio que no llegaba. Los ataques a la mano de los rojinegros dejaban jugadores astures en el suelo pero no lograban su premio. Un placaje alto, costaba el Sin Bin al capitán alavés que dejaba con uno menos a los locales. Así llegamos al minuto 27 en el que, tras una profunda patada de los backs azulones que colocaba la oval en campo local, llegaba una melé que pese al dominio de los locales y ha contar, de nuevo, con quince jugadores en el campo, terminaba en un ensayo de fuerza. La posterior transformación ponía el 0-7 en el luminoso. Se había abierto la caja de pandora....
Los alaveses veían como se les iba el partido, los nervios aparecían, pero el premio al trabajo rojillo llegaba en el minuto 31 con un ensayo de Unai Beristain transformado por Winray. El Esconsu Gaztedi estaba de nuevo en el partido.
Los alaveses metieron una marcha mas, presionaban sin descanso en defensa la posesión del balón y con él en la mano se dedicaban a romper, una y otra vez, la linea de puesta en juego. El dominio se materializaba al final de la primera parte con un golpe de castigo transformado por el apertura local.
Tras el descanso un golpe concedido ponía, de nuevo la igualada en el marcador, y los astures que se veían superiores en el juego a la mano, intentaban superar por el exterior una y otra vez en juego que creaba mucho peligro. Un balón perdido en medio campo tras un contacto muy duro y el fallo de placaje subsiguiente, que en esta categoría se penaliza si o si, suponía en el min 50 un nuevo ensayo visitante con su transformación. El juego no cambiaba y los alaveses avanzaban al contacto hasta cometer fallos de manos que los azulones aprovechaban para mandar a su campo a los alaveses y presionar la caída del balón con sus tercera líneas. Dos golpes concedidos en el min 60 y en el 63 ponía en franca ventaja a los visitantes.
El Esconsu Gaztedi veía volar sus posibilidades y presionaba sin descanso pero con poca cabeza, intentaban cerrar el juego y plasmar su dominio de la melé en el marcador. Los azules mandaban largas patadas a campo alavés buscando una touche que dominaban.
Llegaban los minutos de la verdad y el equipo apretaba en la 22 contraria, se sucedían los golpes azules que se plasmaron hasta en tres tarjetas amarillas que dejaban en cuadro a los visitantes, pero el colegiado no apreciaba la reiteración de faltas hasta el minuto final en el que, pitaba un ensayo de castigo sin tarjeta de forma incomprensible para el público asistentes.
La cabeza no iba y el Esconsu Gaztedi se empeñó en jugar a rugby XV contra XII contrarios facilitando su defensa en estos segundos finales. Los nervios y la presión hicieron el resto y provocaron una perdida de balón que supuso el final del partido y la derrota rojinegra por un 17-23 que les da el punto defensivo.
Una derrota que coloca a los vitorianos en una peligrosa situación en la que el coraje demostrado y la lucha pueden no ser suficientes.
Por lo demás agradecer al numeroso público asistente su esfuerzo y sus ánimos en una aciaga tarde.
